Desde hace dos años, Jessica Romero, decidió cambiar ciertos hábitos que le permitieron descubrir su pasión por el fisicoculturismo en la modalidad bikini fitness.
Jessica Romero es una joven atleta, 'youtuber' salvadoreña y campeona nacional de fisicoculturismo en la categoría Bikini Fitness - Talla Alta, que todos los días, a través de sus redes sociales, motiva a sus seguidores a adoptar una vida activa y una alimentación sana.
Desde hace dos años, Jessica Romero decidió cambiar ciertos hábitos que le permitieron descubrir su pasión por el fisicoculturismo, disciplina que hoy día no solo le ayuda a mantenerse saludable, sino también a ponerse retos y cumplirlos sin excusas.
VIDASANA la entrevistó para conocer qué razones la llevaron a cambiar su estilo de vida, cómo lo logró y cuáles son sus objetivos.
¿Cuál es tu rutina diaria?
Me levanto a las 5:00 a.m. Luego cocino y preparo todos los alimentos que voy a ingerir durante el día, trato que sean seis tiempos bajo una dieta balanceada que incluya carnes, carbohidratos, vegetales y alta en fibra.
Por la tardes hago, como mínimo, hora y media de ejercicios.
En la noche, trato de dormir ocho horas para levantarme relajada.
¿Por qué decidiste adoptar un estilo de vida saludable?
Dentro de mis cambios de hábitos estaba ir al gimnasio, comencé a practicar mucha actividad física bajo supervisión profesional de Anthony Hernández, nutricionista y entrenador físico de Nutri&Fitness, y poco a poco fui sintiendo los cambios que estaba haciendo en mi cuerpo: tenía más energía física y mentalmente siempre me sentía bien, por lo que una vez lo adopté, no he parado; es algo que me apasiona.
¿Por qué te llamó la atención competir en esa disciplina?
La verdad empezó en octubre de 2016 cuando hicimos un viaje a Las Vegas con mi esposo y vimos un certamen de este deporte (el Olympia, uno de los más importantes de esta disciplina). Tuve la oportunidad de ver el perfil de las personas que practican esta modalidad del fisicoculturismo y observé que eran mujeres atléticas, femeninas, no pierden su femineidad, sino al contrario realzaba su belleza y fue cuando al regresar de ese viaje le dije a mi preparador físico que quería practicarlo, comencé y decidí competir. En diciembre de 2016 tuve mi primera competencia en la modalidadBikini Fitness. Fue una buena experiencia, pues gané el primer lugar en el campeonato nacional absoluto, talla alta.
Esta categoría no busca mostrar mucho detalle muscular, sino líneas corporales estéticas, buena postura, excelente proporción y lo más importante que todas las concursantes reflejemos un estilo de vida saludable.
¿Cómo integras tu estilo de vida saludable en tu entorno (trabajo, amigos)?
Se me ha hecho fácil, tengo el apoyo constante de mi esposo, llevamos las mismas horas de entrenamiento y compartimos los mismos horarios de comida, entre otras cosas. Cuando salimos a comer con los amigos, trato siempre de elegir alimentos sin mucha grasa.
La categoría Bikini Fitness fue aprobada en el congreso mundial de la Federación Internacional de Físicoculturismo (IFBB, por sus siglas en inglés) en Baku, en el 2010, para eventos internacionales donde El Salvador no ha sido la excepción como competidor en esta disciplina.
“Mi perspectiva del fisicoculturismo cambió, siempre pensé que era para generar masa muscular y que creaba un aspecto varonil en las mujeres que lo practicaban, pero me di cuenta que no es así”.
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